Seguro que te ha pasado… Has ido a quitar las sábanas de la cama para lavarlas, y te has percatado, con estupor, de que tu colchón tiene ahora unas inquietantes manchas de un color amarillento. ¿A qué se deben? ¿Por qué han salido tan de repente? ¿Se pueden eliminar? ¿Podemos impedir que vuelvan a salir? En este artículo, vamos a centrarnos en este problema, y trataremos de dar respuesta al misterio de las manchas amarillas en el colchón.

¿Por qué salen manchas amarillas en el colchón?

Empezaremos, como no podía ser de otra forma, por el principio de todo: las causas. Y la pregunta que tenemos que hacernos es por qué el colchón tiene manchas amarillas. La primera vez que las vemos, lo que se nos pasa por la cabeza es que la persona que duerme en esa cama ha tenido un pequeño «accidente» y se ha hecho pis mientras dormía. Pero podemos estar tranquilos, y no hace falta que utilicemos pañales para dormir, porque, aunque la orina también puede provocar manchas de color amarillo en el colchón, existe otra explicación más plausible…

¡La humedad! Nos explicamos: la inmensa mayoría de colchones que tenemos actualmente en nuestros hogares cuenta con el látex como uno de sus principales materiales de fabricación. Se trata de un material que se obtiene de cocer resina de árboles y que se usa para crear el núcleo de los colchones. Sin embargo, cuando el proceso de cocción no se hace adecuadamente, el látex comienza a «sudar», expulsando un líquido que crea humedades dentro del colchón. Esas humedades, tarde o temprano, acaban por salir al exterior del colchón, y se manifiestan en la forma de esas antiestéticas manchas amarillas que hemos visto.

Pero no echemos la culpa de todo solo a un defecto de fabricación del colchón, porque nosotros también podemos haber tenido algo que ver en la aparición de manchas amarillas en el colchón. El látex es un material que absorbe el calor, el frío y la humedad… Sin embargo, si el colchón está bien ventilado y disfruta de una correcta transpiración, no debería haber problemas. Lo malo es que, en muchas ocasiones, nosotros colocamos el colchón sobre bases de cama o canapés tapizados, o sobre somieres con un entramado de lamas cerrado. Esto, amigos, bloquea casi por completo la capacidad de transpiración de cualquier colchón, por lo que será cuestión de tiempo que salgan las temidas manchas.

Además, pensemos que, aunque el colchón no tenga ese defecto de fábrica que hace que el núcleo de látex del colchón expulse ese líquido del que hablamos, si el colchón no transpira adecuadamente, nuestro propio sudor al dormir será absorbido por el colchón y acabará por manifestarse como lamparones amarillentos sobre la superficie del colchón. Por tanto, ojo con la ventilación y transpiración de los colchones.

¿Cómo quitar las manchas amarillas del colchón?

¿Es posible deshacernos de ellas para que nuestro colchón vuelva a lucir completamente impoluto como el primer día, o estamos ya condenados a convivir con esas antiestéticas manchas de tonalidad amarillenta? Ahora que ya conocemos las causas de su aparición, las preguntas que nos hacemos son ¿cómo puedo quitar las manchas amarillas del colchón? ¿Existe alguna solución o algún remdio casero?

Lo cierto es que sí, tenemos una solución para las manchas amarillas del colchón. Se trata de coger un paño limpio, humedecerlo con agua y jabón, y frotar con cuidado sobre las manchas. Hay que procurar que el colchón no se moje demasiado, porque si la humedad se filtra al interior del colchón, a los pocos días volveremos a tener manchas, y cada vez será más difícil eliminar esa humedad del núcleo de látex.

Si el paño con agua y jabón no es suficiente, podemos rociar el colchón con un poco de vinagre blanco (de nuevo, con cuidado de no mojar en exceso el colchón), y dejarlo actuar durante 10 ó 15 minutos. Pasado ese tiempo, podemos aplicar bicarbonato de sodio sobre las manchas, esperando unos minutos para que se active el efecto de efervescencia con el vinagre. A continuación, debemos realizar una operación de secado (ya hemos hablado de lo mal que le sienta la humedad a los colchones), y para ello utilizaremos una aspiradora, con la que nos aseguraremos de no dejar restos del bicarbonato sobre el colchón.

Si, después de todo esto, las manchas aún persisten, tenemos una última sugerencia: humedecer una esponja con un poco de agua oxigenada, y frotarla con cuidado sobre los restos de las manchas. Eso sí, después hay que dejar que el colchón se seque por completo al aire. Con suerte, las manchas habrán desaparecido por completo.

¿Cómo evitar que le salgan manchas al colchón?

Si hemos conseguido limpiar las manchas amarillas del colchón, o si nuestro colchón es nuevo, y queremos evitar que aparezcan en el futuro, tenemos varios consejos para ti. Todos ellos van dirigidos a un mismo objetivo: evitar la humedad en el colchón, que ya hemos dicho que es la principal culpable de las desagradables manchas.

Si quieres saber cómo evitar que salgan manchas amarillas en el colchón, no te pierdas las siguientes recomendaciones:

• Usar una base abierta para el colchón: si tu colchón descansa sobre una base tapizada o un canapé cerrado, es recomendable cambiar a un modelo más «abierto» que permita una mejor circulación del aire y, por tanto, una mejor transpiración del colchón. Los somieres de láminas pueden ser una buena opción.
• Ventilar la habitación a diario: abrir la ventana de par en par después de levantarnos para que se ventile la habitación es una práctica muy recomendable, no solo para prevenir la aparición de las manchas, sino también la presencia de los ácaros. Eso sí, no te olvides de abrir también la cama (retirar las mantas y sábanas) para que se airee el colchón.
• Voltear el colchón regularmente: todo el mundo segrega ciertas sustancias corporales mientras duerme. El sudor y la saliva son los más comunes, y acaban por humedecer el colchón. Para evitar que estos restos se acumulen día tras día en los mismos puntos, conviene que volteemos el colchón, al menos una vez al mes.
• Utilizar fundas para colchones: además de la consabida sábana bajera, es recomendable utilizar también una funda de colchón, para protegerlo de esas sustancias que segrega nuestro cuerpo y a las que hacíamos referencia en el punto anterior. Piensa que estas fundas para colchones supondrán una barrera adicional que dificultará la llegada de la humedad al núcleo del colchón.

Manchas amarillas en el colchón: conclusiones

¿Qué hemos aprendido hasta ahora? Conocer las causas del problema, lo que podemos hacer para evitarlo antes de que surja, y las posibles soluciones si ya lo estamos padeciendo son tres puntos fundamentales para impedir que el colchón amarillo vuelva a ser inconveniente en el futuro.

• Conocemos por qué el colchón se pone amarillo: puede deberse a un defecto de fábrica a la hora de tratar el látex o, con mayor probabilidad, a la humedad provocada por la mala transpiración del colchón.
• Hemos aprendido a limpiar las manchas amarillas del colchón viscoelástico: puede ser con un paño limpio ligeramente humedecido con agua y jabón; con la clásica combinación de vinagre y bicarbonato; o, si todo lo anterior falla, frotando con una esponja y agua oxigenada sobre la zona afectada. Eso sí, en cualquiera de los casos, siempre hay que secar el colchón al 100% para evitar que las manchas reaparezcan.
• Sabemos cómo impedir que aparezcan manchas amarillas en el colchón: el secreto reside en impedir que la humedad, ya sea ambiental o corporal, alcance nuestro colchón. Para ello, es recomendable utilizar una base abierta para el colchón, ventilar el dormitorio todos los días, darle la vuelta al colchón con regularidad, y usar una funda del colchón para protegerlo.

Con todos estos conocimientos, cada vez que alguien nos pregunte «¿por qué mi colchón tiene manchas amarillas?», podremos, no solo darle la respuesta que pide, sino también ofrecerle una solución a su problema, y algunos consejos para que no le vuelva a suceder.