Son muchas las personas que padecen síndrome facetario, y muchos de entre quienes lo sufren los que acuden a nosotros para preguntarnos cómo dormir con síndrome facetario.
Si vivir con síndrome facetario ya nos plantea dificultades, intentar dormir con síndrome facetario y no conseguirlo es un problema doble, pues la fatiga provocada por la falta de sueño puede incidir negativamente en la propia patología.
Qué es el síndrome facetario
Lo lógico es que ya lo sepas si has llegado hasta esta página, pero lo vamos a explicar por encima por si acaso. El síndrome facetario es una inflamación en las articulaciones de la zona lumbar de la columna vertebral, producida por una descompensación muscular que provoca un exceso de roce o presión en las mismas.
Ese roce o presión de las unidades intervertebrales, que pueden dos, tres o más, provoca inflamación, dolor, y como consecuencia, dificulta el sueño a quienes lo sufren.
Aunque en la mayoría de los casos sea relacionado con problemas óseos o musculares, lo cierto es que en muchas ocasiones, el síndrome facetario puede estar relacionado con disfunciones viscerales ginecológicas, gástricas, de riñón, etc.
Cuál es la mejor postura para dormir si tengo síndrome facetario
Como ya explicamos al hablar sobre cómo dormir con ciática, dormir de lado es la mejor forma de aliviar el dolor cuando se tiene síndrome facetario, pero no de cualquier manera.
Si dormimos de lado, tenemos que tener en cuenta también las siguientes pautas:
- Mantener la espalda recta y perpendicular al colchón, sin dejarnos caer hacia delante o hacia atrás.
- Doblar las piernas ligeramente, haciendo un ángulo abierto de unos 60º.
- De forma general, nos vamos a acostar siempre sobre el lado izquierdo.
- Si nuestro dolor se concentra en la zona derecha, la mayor parte del tiempo nos debemos mantener acostados sobre la parte izquierda, y viceversa.
- Alternar el costado izquierdo y el derecho.
- Usar siempre un cojín o almohada entre las piernas, que nos permita eliminar la presión sobre el pubis y las vértebras, alineando la columna de manera efectiva.
La posición boca abajo está totalmente descartada, y sólo de manera ocasional podríamos ponernos boca arriba, a sabiendas de que la curva de la espalda va a ejercer una presión que no nos va a beneficiar. Para contrarrestarlo, colocaremos una almohada o cojín en el hueco de las lumbares, y cambiaremos cuanto antes a la posición de lado.
A la hora de incorporarnos, debemos hacerlo siempre lateralmente. O sea, nos sentaremos en la cama en un movimiento lento y pausado, y una vez sentados, nos pondremos de pie.
En el siguiente vídeo del canal de «Clínica QO», podrás corroborar algunas de los datos que acabamos de citar, al mismo tiempo que extraes otra serie de consejos y buenas prácticas para dormir con dolor de espalda.
Parte del contenido de esta página procede de Amazon. Los precios y disponibilidad de sus productos cambian constantemente y se actualizan cada 24 horas. Se aplicará a la compra del producto el precio y la disponibilidad que aparezca en Amazon en el momento de la compra.