La gripe es una de las afecciones más comunes durante el otoño y el invierno. Son millones las personas que padecen sus síntomas en todo el mundo. Y por si los mocos, la tos, la fiebre o el malestar corporal no fueran suficientemente molestos, hay que sumar un problema colateral: ¡resulta muy difícil conciliar el sueño con todos esos síntomas! Por eso, en este artículo, nos hemos propuesto buscar una solución… ¡Te traemos los mejores trucos para dormir cuando se tiene fiebre!
A ver, no queremos decir que tus síntomas vayan a desaparecer como por arte de magia, pero sí que se trata de algunas soluciones o pautas que te ayudarán a mitigar las molestias y, de paso, te ayudarán a descansar mejor y más fácilmente. Así que, si estás interesado en averiguar cómo dormir mejor con fiebre, no dudes en acompañarnos a lo largo de los siguientes párrafos.
Los mejores consejos para dormir bien con gripe
¿Estás harto de que los síntomas de la gripe, además de tenerte hecho una piltrafa durante el día, te impidan descansar bien por las noches? Te invitamos a que pruebes las siguientes recomendaciones para dormir mejor cuando se tiene gripe. Te aseguramos que funcionan y que notarás la diferencia a la hora de descansar:
- Tomar los fármacos prescritos por el médico: nuestro médico será quien mejor conozca nuestra situación y qué remedios nos resultarán más beneficiosos. Por consiguiente, es imperioso seguir sus instrucciones y tomar aquellos medicamentos que nos recete, respetando su posología.
- Elevar el cabecero de la cama: mantener una postura ligeramente incorporada en la cama nos va a facilitar mucho la respiración. En esta posición, también contribuimos a la correcta apertura de los senos nasales, lo que nos facilitará también el proceso de toser.
- Poner un humidificador en el dormitorio: mantener las mucosas nasales húmedas evitará la sequedad y la congestión nasal, lo que nos puede ayudar a dormir mejor. Para ello, podemos servirnos de un pequeño humidificador en el dormitorio, con el que conseguir el grado idóneo de humedad en el ambiente.
- Hidratarnos bien: una correcta hidratación es fundamental para que los síntomas de la enfermedad remitan. Además, como ya comentábamos en el punto anterior, esa hidratación nos ayudará a fluidificar la mucosidad, y ello, a su vez, nos permitirá respirar y dormir con mayor facilidad.
- Tomar una infusión caliente antes de acostarnos: una bebida caliente (que no contenga cafeína para no desvelarnos) puede reconfortarnos a la hora de dormir. Si, además, le añadimos un poco de miel y limón, podremos aliviar algunos síntomas de la gripe, como el dolor de garganta o la congestión nasal.
¿Cuál es la postura más recomendable para dormir con gripe?
Con toda probabilidad, los síntomas de la gripe que más nos molestan a la hora de intentar conciliar el sueño son la congestión nasal y la tos. Por ello, dormir ligeramente incorporados en la cama puede resultarnos muy beneficioso.
Para ello, podemos optar por poner una segunda almohada sobre la nuestra habitual, con lo que conseguiremos elevar un poco nuestra posición. Pero hay que tener cuidado, porque si solo inclinamos el cuello, podemos lesionarnos las cervicales. Es preferible optar por elevar la parte superior del colchón, de modo que podamos estar algo más incorporados, pero sin riesgo de sufrir dolores musculares.